Situado en un emplazamiento perfecto como es la Plaza Mayor de Murcia y con unas raíces Alicantinas, llega a nuestra Región una cervecería que tiene la intención de dejarnos con la boca abierta "El LLagostí".

Conchita, su propietaria, nos presentó su concepto de tapas con estilo propio que le ha valido premios en diversos concursos de Alicante. Nosotros tuvimos la oportunidad de probar dos de sus creaciones. 

Comenzaremos con "EL MEJILLÓN", primer premio de "Tapeáte 2015". Como su nombre indica, es un mejillón en escabeche sobre concha de pan negro, reducción de su jugo acompañado de crema de marisco y alga nori. Tras probarla os diré que su premio está más que justificado.

Lo siguiente que nos pusieron fue otra tapa ganadora, esta vez un segundo premio. Consiste en una marinera, pero no una marinera cualquiera: con una base de pan casero crujiente y una ensaladilla de aguacate y naranja, todo ello coronado con una sardina ahumada y tiras de piel de naranja confitada y acompañada con un chupito de gazpacho. Una verdadera delicatessen. 

Tras abrir boca,llegamos a la receta estrella del local "Langostinos al Horno", plato que, en palabras de Carlos, "se come como si fueran pipas", y después de probarlo qué razón tenía. Siendo simplemente langostinos pelados con un poco de sal y al horno ha caído una ración de veinticuatro como si nada, creedme si os digo que vale la pena ir a probarlos, después no pararéis de chuparos los dedos. 

Pero no solo de marisco vive el hombre, también nos encontramos en la carta una gran variedad de tostas, ensaladas, mini hamburguesas y hojaldres rellenos. 

La minihamburguesa que nos pedimos (dos por ración) fue la menos convencional, KIRIKO, con carne de vacuno, manzana, repollo y crema de wasabi, una sorpresa para nosotros al probar la gran combinación de la manzana y el picante de la crema de wasabi junto al crujiente del repollo.

Nos decantamos por una tosta de solomillo de pato y crema de hongos, coronando con rúcula, reducción de frambuesa y naranja confitada. Quizá fue lo más flojo,pero no por defecto de la tosta sino por exceso de calidad de los demás platos.

Después de lo salado viene lo dulce ¡y en la redacción somos muy golosos!Salimos muy muy contentos con su tarta de tres chocolate y un sorbete de naranja que nos sirvieron como colofón.

No quisiera terminar esta entrada sin comentar la decoración tan luminosa y llamativa, con muebles modernos y elegantes pero a la vez desenfadados y coloridos. Aparte de una excelente carta también tienen exposiciones de arte; nosotros vimos una de fotografías titulada "Good Morning Vietnam".

No dudéis en visitar este gran local lleno de gente amable y buenos productos. ¡¡¡Buen provecho y disfrutad comiendo!!!